Era el filo de la media noche, y yo estaba tumbado sobre mi catre, de esos catres de metal que a veces se suelen doblar y causar penosos e hilarantes accidentes. Intentaba dormir pero el insomnio cruel se resistía a mis súplicas. Me puse a divagar sobre temas de literatura, y, vaya a saber Dios por qué razón, recordé unos versos del Altazor de Huidobro que sin duda me causaron gracia. Estaba por superar la barrera sensorial e iniciaba ese estado crepuscular mitad sueño mitad vigila, cuando furtivamente dirigí la mirada a una de las cuatro esquinas de mi pequeño dormitorio de 2…
Y este es mi relato: "Mi encuentro con una araña"
Mi encuentro con una araña Omar Sandoval
Era el filo de la media noche, y yo estaba tumbado sobre mi catre, de esos catres de metal que a veces se suelen doblar y causar penosos e hilarantes accidentes. Intentaba dormir pero el insomnio cruel se resistía a mis súplicas. Me puse a divagar sobre temas de literatura, y, vaya a saber Dios por qué razón, recordé unos versos del Altazor de Huidobro que sin duda me causaron gracia. Estaba por superar la barrera sensorial e iniciaba ese estado crepuscular mitad sueño mitad vigila, cuando furtivamente dirigí la mirada a una de las cuatro esquinas de mi pequeño dormitorio de 2…
Este es mi poema "Una Infinita espera"
Una infinita espera
Omar Sandoval
Absorto en el silencio
que resuena en mis ínfulas de Orfeo
no sé si estoy entre dos nieblas
y al fin no sé si estoy, si soy, si fui
Aguardo, ¿qué?
una noche escampada de luciérnagas
o me aguardo en el recuerdo incierto
Espero, ¿qué?
una estampida de pájaros sedientos
que socaven la carroña de los sueños
o esculpan con sus picos mis lamentos
Renuncio, ¿a qué?
tal vez a posesiones inventadas
a mentiras que fueron verdaderas
a las promesas hechas a destiempo
Y en fin a renunciar
a esperar
a aguardar
ese milagro de la muerte austera