El paracaidista infantil, es un cuentario, cuyo autor es el guatemalteco Luis Xalin. Cabe resaltar que el texto obtuvo el año pasado el primer lugar en categoría jóvenes adultos en el North Texas Book Festival 20 Years y mención de honor en el International Latino Book Awards 2020, en Estados Unidos.
Los cuentos tienden a caracterizarse de cierta forma porque resulta que todos están hilvanados entre sí, entre diferentes momentos o facetas de la vida. Los textos están entrelazados con el tiempo presente y pasado en que se logra identificar con la técnica del flashback, porque incide en momentos en que se rompe con lo cronológico y se hacen vueltas rápidas al pasado, lo cual de alguna forma permite armar todo un rompecabezas del libro.
Xalin de forma muy peculiar y distintiva, determina un lugar geográfico en el texto en el que se centra en un pueblo del área sur, llamado Cumatzil, nombre ficcional inspirado en Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla, Guatemala. Además, el autor hace uso de un lenguaje llano y coloquial que va conforme al contexto social y familiar.
Cada uno de los cuentos se determina en la voz del protagonista, un niño, quien va narrando los hechos tal cual desde la perspectiva y comprensión de su edad. Y es que quizá cuando crecemos nos olvidamos de cómo pensábamos cuando éramos niños, y pues acá entre las líneas de este libro podremos encontrar y recordar la forma de ver el mundo a través de un niño, de cómo se siente y qué es lo que piensa ante las circunstancias que atraviesa en medio del ambiente familiar y de la cotidianidad que lo rodea.
En los dos primeros cuentos del texto se muestra un aire de tristeza y a la vez de resilencia, porque la temática es la muerte de niños, donde los hechos y el sentir de los adultos es narrado por el niño, quien emerge entre el mundo de sus padres, observa cómo cada uno sufre y se desploma emocionalmente por la pérdida de sus pequeños hermanos. Pero en medio de esos vacíos y silencios, el niño entiende de una forma metafórica qué es la muerte y cómo luego del dolor surgen nuevas esperanzas en su familia. Luego, páginas adelante se encuentra el cuento Demasiado tarde, que resulta ser un conmovedor relato del amor entre tía y sobrino y los últimos días antes de su muerte, siendo el reflejo del amor puro que puede dar un niño a otro sin miedos ni prejuicios.
Entre tanto los cuestionamientos del niño protagonista nos lleva hacia el cuento El pianito, en donde se cuestiona el por qué los adultos no escuchan a los niños, en donde aduce que los adultos suelen ser muy cerrados, no les gusta indagar en el por qué sucede algo y que poco les importa lo que un niño quiere explicar o expresar. Si en este mundo cada uno de los adultos tuviera la paciencia de escuchar a los niños seguros muchas situaciones serían diferentes, los cuestionamientos llevan al lector a un punto de reflexión y regresar a esa etapa quizá ya olvidada.
Entre otros cuentos se encuentran temáticas como son los miedos de los niños, la decencia a través de la sinceridad y la moral, la puesta de los prejuicios, el acoso y las burlas que latentemente puede estar expuestos los niños desde cualquier ámbito, y así mismo la exposición emocional y psicológica de los mismos. Por otro lado la enseñanza del cuidado del medio ambiente, que es otro punto de reflexión que incita al cuidado de los mares, así como el cuidado de los bosques ante la constante amenaza de cortes masivos de árboles y la depredación a la fauna que en el futuro cercano será un caos ambiental que nos perjudicará a todos.
El paracaidista infantil nos lleva hacia pensamientos ya olvidados, quizá poco recordados y como decía el Dr. y especialista en Ciencias de la Educación José Fernández Bravo: «Los niños te hacen pensar que quizás el adulto es un niño empobrecido». Seguramente sí, estar inmersos en otros asuntos nos hace dejar de pensar tan detenidamente a como antes.
Reseña escrita por Carmen Tocay
Editora y columnista
Revista Luna, 2021
Comments